Para enamorarse esperan luna llena

y se ahogan en la miel de su resplandor;

miles de pasiones su encanto desencadena

los convence de lo que sienten es amor.

Plenilunio en perigeo envenena corazones

al verse tan grande, tan digna y majestuosa;

en octubre rebosa en todas las conversaciones

transformada entre las musas la más famosa.

¿Alguien dedica poemas a esta luna nueva?

¿Has escuchado sobre ella alguna canción?;

no es que a comparar las dos hoy me atreva

pero te hablaré de lo que dicta mi corazón.

Aguarda oculta de su amado de día y noche

bañado su cuerpo completamente en sombra;

el buscar su cuerpo a tientas no es reproche

porque sabes que aun en oscuridad te nombra.

¡Luna negra! quién pudiera descifrar tu misterio

y apagar el resplandor del sol para admirarte;

marcando el fin de tu ciclo y de tu cautiverio

para solo entonces todos los días poder amarte.

Deseo ser capaz de prorrumpir tu silencio

para hacerte mía, aun sea por un instante;

y con esto mismo a sufrir me sentencio

con tal de amarte de ahora en adelante.

Así como la luna tiene ciclos y durante estos muestra quien es, así cada día decido qué y quién mostrarlo, algunos días me siento estancada al final de la fase, sin brillo, sin nada maravilloso, sin belleza y resplandor...
 Espero como en los ciclos lunares pasa con los días y comienza a iluminarse, así esto, lo que siento, como pienso se ilumine. ¿mucho drama? Ya lo sé, pero a veces simplemente no lo puedo contener.
¿En qué fase estás tú?

Salmos 104:19

Creaste la luna para que marcara las estaciones,
 y el sol sabe cuándo ponerse.